Que vengas a buscarme cada día con mil cosas que contar. Y que no podamos despegar las pestañas de tanto soñar despiertos, aunque sea complicado contigo, porque acabes durmiéndote.
Levantarnos un día con ganas de quemar el asfalto, y nuestros labios, a besos. Y que, carretera y manta, lleguemos al fin del mundo. O no. O que nos encerremos aquí, qué más da, también puede convertirse en el fin del mundo. Pero con una baraja, y dos ases en la manga.
¿Te cuento el secreto? Que el hielo no enfría solo las bebidas, también las ideas.
Y los momentos, los recuerdos.
Así que, camarero,un ron. Con doble de hielo.
Y brindemos por la noche más larga.
4 comentarios:
Chapó :)
Me ha requeteencantado Mart! Pero mucho mucho! :))
Sin duda un texto contundente. ¿El ron es para olvidar o para vivir más intensamente los momentos?.
Nos leemos.
Te has salido con esta entrada(:
Wauu me he encontrado con tu bloog y es fantástico. Me guusta mucho como escribes incluso hasta el diseño que tienes. Intentaré pasarme siempre que pueda. Por si te interesa, te dejo el blog que llevo con una amiga: http://www.esperandoalarespuesta.blogspot.com/ y el que llevo sola: http://sacadodeltercercajon.blogspot.com/ Esperamos una respuesta tuya. Besos mil, Char.
Publicar un comentario