martes

Sol.

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Y aquí estás, tumbada bajo el sol.
Lo ves ahí arriba, tan inmenso, tan amarillo, tan inalcanzable. Sientes el calor extendiéndose por tu cuerpo, quema. Y sin embargo ahora... parece caber entre tus manos, parece que puedas encerrarlo entre sus dedos y almacenar su brillo, y utilizarlo en pequeñas dosis cuando tus ojos se apaguen y se queden opacos.

Y ahora, en tus oídos suena paradójicamente algo llamado "Bajo la lluvia", y sonríes, y miras de nuevo el sol, ahí arriba. Y, sin pensarlo, tal vez sin quererlo, coges de él toda la fuerza, esas ganas de comerte el mundo a pequeños bocados y saborearlos poco a poco, aderezados de buenos momentos y malos, de besos y lágrimas, de abrazos que arreglan más que las palabras. De noches de estrellas, de sueños estrellados y otros muchos que algún día volarán ahí arriba, junto al sol, y lucharán por no acabar convertidos en cenizas.

2 comentarios:

un par de lacasittos dijo...

"y lucharán por no acabar convertidos en ceniza"

qe bonitta frase!=)

Celia dijo...

Que texto tan lindo.. Has coseguido sacarme una sonrisa (:

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